PUERTA DEL SOL (Inti punku)
Es un monumento de las
Ruinas
Arqueológicas de Tiahuanaco, Bolivia.
Es conocida a nivel mundial como la mejor muestra del grado de perfección que
alcanzó esta cultura, tanto por el arte como por la simbología que atesoran sus
bajos relieves.
Este portal lítico fue trabajado en un solo bloque
de piedra andesita de aproximadamente 10 t
de peso.
En el pasado no era una pieza aislada sino, más bien, parte de una edificación
mayor, que pudo ubicarse en la cima de la Pirámide de Akapana o en el mismo Kalasasaya,
donde existen varias piezas del mismo material que el de esta puerta.
La puerta tiene en su dintel una imagen del Señor de los báculos, comúnmente
confundido con Viracocha, que está rodeado de unas criaturas aladas que se
arrodillan ante él. Algunas de estas figuras representan hermosas cabezas de
cóndor. La puerta quedó inconclusa ya que hay varias figuras sin acabar, como
si los tallistas hubiesen abandonado precipitadamente el martillo y el cincel.
La puerta presenta en su parte superior derecha una
rotura que divide la piedra en dos. Se cree que fue rota por un rayo, pero esta
teoría no puede verificarse a causa de que no hay huellas de quemaduras en la
piedra ni en su interior. Si comparamos esto con la leyenda de los gigantes, la
puerta habría sido rota al ser depositada por causa del golpe, ya que la
dejaron caer. Esto aún sigue siendo un misterio para los arqueólogos. De
acuerdo con la leyenda aymara, la puerta guarda un secreto que los antiguos aymaras
dejaron escondido en Lakaqullu para ayudar a una futura
humanidad en apuros. Actualmente es uno de los monumentos más importantes de
Tiwanaku[1]
Tiahuanaco o Tiwanaku
es un antiguo complejo arquitectónico y actual yacimiento arqueológico de
Bolivia, ubicado en el altiplano central boliviano, 20 km. al sureste del lago
Titicaca del Departamento de La Paz.
Se piensa que fue el centro de una civilización
antigua basada en la agricultura y la ganadería, la llamada cultura Tiahuanaco,
que se caracteriza por su arquitectura decorada con relieves y planos incisos
colocados sobre estelas, y que abarcaba el territorio actual del Lago Titicaca,
entre el Perú y Bolivia. Está compuesto por siete construcciones
arquitectónicas importantes: Kalasasaya, Templete Semisubterráneo, Pirámide de
Akapana, Portada del Sol y Puma Punku.
Testimonio de una importante cultura preincaica, la
cultura Tiahuanaco poseía un puerto en el Lago Titicaca aunque ahora se
encuentre a 20 km de distancia de él. La magnificencia de su cultura se refleja
en su excelente obra cerámica con los famosos queros (vasos ceremoniales), los
huaco-retratos (retrato tridimensional de un rostro humano en una vasija) así
como los textiles y sobre todo en las construcciones arquitectónicas, muchas de
las cuales poseen orientación astronómica.[2]
